sábado, 31 de agosto de 2013

Si alguien admiro...

Es Bertrand Russell. Tiene una cualidad muy rara: humildad intelectual. Además de la gracia de abordar cuestiones complejas en lenguaje accesible y sin visos de soberbia (contrario a Sócrates, que se glorificaba a si mismo pisoteando a sus interlocutores por medio de su filosofía).

Bertrand Russell dice lo que es; expone los puntos flacos de religiones y posturas ideológicas pero jamás se expresa peyorativamente.

Para mí, Bertrand Russell es el arquetipo del hombre racional.


Lo conocí por dos libros: "La conquista de la felicidad" y "Por qué no soy cristiano".